miércoles, 23 de julio de 2008

la carne es el mejor disfraz

a veces, los ojos demuestran calidez en almas que flamean al solitario viento de un suspiro triste y desolado

a veces, es la luz interna la que demuestra que lo oculto es solamente temido por algunos

otras veces, en cambio, es la valentía de mirar con ojos abiertos a nada en particular, para intentar verlo todo tal cual es

y a veces, muy pocas veces, esos ojos cruzan otros ojos similares, confirmando por fin luego de interminables noches que un deseo es posible, soñar no fue en vano


el amor a la buena vida solo da frutos en noches de calma nube y rugosas palpitaciones bajo el furor de mordiscos valientes

no me hables en prosa que la vida no contenta con tales inmundas groserias

un trago amargo es equivalente a 3 años de soportar un mal amor, cruel destino para quien no anima decir no a buenas manos

1 comentario:

Raul dijo...

Javo, siempre y cuando me reflejes, no hay ningún problema en que adaptes ochenta.

Eso sí, si eres de Madrid mándame un mail cuando lo vayas a hacer, ¿vale? ;)

¡Un saludo!